Colosenses 2 - Reina Valera 1990 (Adventista)1. Quiero que sepáis cuán grande lucha sostengo por vosotros, por los que están en Laodicea y por todos los que nunca me vieron; 2. para que unidos en amor, sus corazones sean confortados, hasta alcanzar toda la riqueza de la plena seguridad de comprensión, y conocer el misterio de Dios el Padre, y de Cristo. 3. En él están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento. 4. Esto digo, para que nadie os engañe con palabras persuasivas.* 5. Porque aunque estoy ausente en cuerpo, en espíritu estoy con vosotros, gozándome al ver vuestro buen orden y la firmeza de vuestra fe en Cristo. 6. Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, así andad en él, 7. arraigados y edificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis aprendido, rebosando en acción de gracias.* Plenitud de vida en Cristo8. Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y vanas sutilezas, según la tradición de los hombres, conforme a los elementos del mundo, y no según Cristo. 9. Porque en Cristo habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad.* 10. Y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad. 11. En él también fuisteis circuncidados con una circuncisión hecha sin mano, al despojaros del cuerpo de los pecados, mediante la circuncisión hecha por Cristo.* 12. Sepultados con él en el bautismo, fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios, que lo levantó de los muertos. 13. A vosotros, que estabais muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida con Cristo, y perdonó todos vuestros pecados.* 14. Canceló la nota de nuestra deuda, que consistía en ordenanzas desfavorables a nosotros; la quitó, y la clavó en la cruz. 15. Y despojó a los principados y potestades, los exhibió en público, y triunfó sobre ellos en la cruz.* 16. Por tanto, nadie os juzgue en comida o bebida, o en días de fiesta, nuevas lunas o sábados. 17. Todo eso es sombra de lo por venir, pero la realidad es Cristo.* 18. Nadie os prive de vuestro premio, afectando humildad y culto a los ángeles, basándose en visiones, vanamente hinchado en su mente carnal, 19. sin mantenerse unido a la Cabeza, de la cual todo el cuerpo, nutrido y unido por las junturas y ligamentos, crece con el crecimiento de Dios.* 20. Siendo que habéis muerto con Cristo a los rudimentos del mundo, ¿por qué, como si aún pertenecierais al mundo, os sometéis a ordenanzas, como: 21. "No uses, no gustes, no toques"? 22. Todas esas cosas están destinadas a perecer con el uso, porque se basan en mandatos y enseñanzas de hombres. 23. Tales cosas tienen apariencia de sabiduría con su culto impuesto, su falsa humildad y su duro trato del cuerpo. Pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne. |