Estudio Bíblico | Explicación de Isaías 60:10 | Comentario Bíblico Online
Los extranjeros vienen a ofrecer a Sion, no sólo sus cosas, sino sus personas.
1. Ellos serán (v. Isa 60:10) quienes reedificarán los muros de Jerusalén Puesto que Jehová los admite en Su pueblo (v. Isa 56:3-8), alegremente se prestarán a este servicio que redunda en beneficio de ellos mismos. Los reyes, ya mencionados en el versículo Isa 60:3, acostumbrados a ser servidos, con gusto asumirán el oficio de servidores (v. Isa 60:10): «sus reyes te servirán» El resto del versículo Isa 60:10 contiene frases que nos recuerdan las de Isa 54:7.
2. La Jerusalén celestial, eterna, recogerá, purificadas y sublimadas, las bendiciones del reino milenario. Esto ha de ser tenido en cuenta al estudiar muchos lugares de estos capítulos Isa 60:1-22 al Isa 66:1-24 de Isaías. Por eso, el v. Isa 60:11 tiene un extraordinario parecido a lo que Juan dice (Apo 21:24, Apo 21:25) de la Jerusalén celestial. No sólo en el cielo, sino también en la Sion terrenal futura, la necesidad de cerrar las puertas de noche habrá cesado: en el cielo, porque allí no entrarán los ladrones; en la Sion terrenal futura, porque serán tenidos a raya con cetro de hierro (v. Isa 60:12). En Zac 14:17-19 hallamos profecías parecidas a la del v. Isa 60:12. Las leyes que emanen de Jerusalén habrán de ser obedecidas de buen grado o por la fuerza.
3. A los servicios prestados por los árabes del oriente del país, y por los países de allende el Mediterráneo, se unen ahora (v. Isa 60:13) «los de los vecinos del norte, que ofrecerán sus incorruptibles maderas, como hicieron para la construcción del primer templo (1Re 5:8-10)» (Moriarty). Recuérdese que el Líbano era famoso por sus cedros. El versículo Isa 60:14 resume, en la voluntaria humillación que se imponen a sí mismos los que otrora humillaron y escarnecieron a Israel, el homenaje universal que las naciones tributarán a Sion del Santo de Israel, y reconocerán en la capital del pueblo de Dios la Ciudad de Jehová, la ciudad que Dios protegió de modo especial y que, ahora, ha redimido definitivamente y exaltado sobre todas las ciudades y pueblos de la tierra.
