Historias Cristianas | Ilustraciones | Anécdotas de la Biblia Sobre DEFRAUDACION para predicar en sermones
DEFRAUDANDO A DIOS
Un caballo se escapó de la cuadra una mañana, y no volvió sino hasta por la noche. Cuando el amo lo reprendió, el caballo replicó: –Pero al cabo he vuelto sano y salvo, y usted tiene aquí su caballo. –Es verdad –contestó el amo–, pero mi campo no ha sido arado. Así también, si un hombre se convierte en edad avanzada, Dios tiene al hombre, pero en su obra habrá sido defraudado por el hombre. Y el hombre se habrá defraudado a sí mismo.