Estudio Bíblico | Explicación de Hebreos 11:20 | Comentario Bíblico Online
Brevemente se refiere el autor sagrado, en estos versículos, a la fe que ejercitaron respectivamente Isaac, Jacob y José.
1. «Por la fe (v. Heb 11:20), bendijo Isaac a Jacob y a Esaú, puesta la vista en el futuro de ambos» (NVI). Al hacer caso omiso de las intrigas que desembocaron en esta bendición de Isaac a sus dos hijos, el autor sagrado sólo hace notar que fue por fe como bendijo a Jacob y a Esaú (por este orden), puesta la vista en el futuro de ambos, pues aunque otorgó a Jacob la bendición que correspondía al primogénito (Gén 27:27-29), también hubo para Esaú un asomo de bendición y, por cierto, con profecía a larga distancia de tiempo (v. Gén 27:39, Gén 27:40, comp. con 2Re 8:20-22), teniendo en cuenta que esos dos versículos de Gén 27:39, Gén 27:40 deben leerse en la NVI o en la Biblia de las Américas, que dan la traducción más probable.
2. «Por la fe (v. Heb 11:21), bendijo Jacob, cuando estaba para morir, a los dos hijos de José, y se prosternó en adoración apoyándose en la extremidad de su báculo» (NVI). El autor sagrado ha unido aquí en uno dos episodios distintos: (A) Gén 48:20, que trae la bendición; (B) Gén 47:31, que trae la adoración. El autor sagrado ha tomado este segundo de los LXX, que habla de la extremidad, cabeza o puño del báculo, donde el texto hebreo, según la puntuación masorética (que no es infalible), dice cabecera del lecho. En todo caso, lo que nos interesa es que, en ambos casos, Jacob actuó por fe: En Gén 47:31, al creer firmemente que Dios le daría la Tierra Prometida a su descendencia, pues mandó a José que le enterrase con sus padres, es decir, en Canaán. En Gén 48:20, al creer con la misma firmeza la revelación que le fue hecha acerca del porvenir de las dos tribus de Efraín y Manasés.
3. El versículo Heb 11:22 se refiere a José: «Por la fe mencionó José, cuando ya se acercaba al fin de su vida, la salida de los israelitas de Egipto y dio instrucciones sobre lo que había de hacerse con sus restos mortales» (NVI). El autor sagrado hace aquí referencia a Gén 50:24, Gén 50:25 (comp. con Éxo 13:19), donde la fe de José se echa de ver en que, antes de morir, al creer firmemente la promesa hecha a sus padres, mandó que sus restos mortales (lit, sus huesos) fuesen trasladados a Canaán cuando los israelitas saliesen de Egipto en dirección a la Tierra Prometida.
