2. Piénsalo dos veces si no posee un deseo apasionado de darte a tí también. No me refiero a regalos caros, grandes cantidades de dinero o ropa. Un oído que escucha, flexibilidad, paciencia y la disposición de ser corregido son regalos de mucho mayor estima.
¿Te gustó este artículo?
Suscríbete a nuestro canal de YouTube para ver videos sobre temas bíblicos.
Visita nuestros cursos bíblicos.
Se miembro de nuestro ministerio y obten todos los recursos.