«…LLAMANDO JESÚS A UN NIÑO, LO PUSO EN MEDIO DE ELLOS…» (Mateo 18:2)
Un regalo infantil lleno de amor
En medio de todos tus logros y aplausos, para un momento y permite que esta historia de James Dobson te recuerde que la vida no consiste en cosas, sino en relaciones.
«Hace algún tiempo un amigo mío castigó a su hija de tres años por echar a perder un rollo de papel dorado que tenía para empaquetar los regalos. El dinero era escaso y se alteró cuando ella intentó decorar una caja que iba a poner debajo del árbol de Navidad. Sin embargo, a la mañana siguiente la pequeñita llevó el regalo a su papá y le dijo:
‘Esto es para ti, papá’. Se sintió avergonzado por haber reaccionado tan duramente como lo hizo. Pero su enfado surgió de nuevo cuando abrió la caja y la encontró vacía. Le gritó: ‘¿No sabes que cuando das un regalo a alguien se supone que hay algo dentro?’. La niñita le miró y con lágrimas en los ojos le dijo: ‘Pero papá, si no está vacía. Soplando, la llené con besitos, y puse todo mi cariño en ella; después la envolví especialmente para ti’. Al oírla, el hombre quedó deshecho.
La abrazó rápidamente y le pidió perdón. «Mi amigo me contó que guardó la caja dorada al lado de su cama durante años; cuando se desanimaba, solía sacar un beso imaginario y recordar el amor de la niña que lo había metido allí. Nuestros hijos nos han dado, de una manera muy real, a cada uno de nosotros como padres una caja dorada llena de su amor incondicional. No se puede tener un tesoro más precioso.»
¿Te gustó este artículo?
Suscríbete a nuestro canal de YouTube para ver videos sobre temas bíblicos.
Visita nuestros cursos bíblicos.
Se miembro de nuestro ministerio y obten todos los recursos.