¿Quien es un hereje? ¿Existen Herejes en la Iglesia Cristiana?

El Hereje Según La Biblia ¿Hay herejes Hoy en día dentro de la Iglesia Evangélica?

¿Qué le dices a alguien que está escuchando a un falso maestro?

¿Quien es un hereje? ¿De donde viene la palabra hereje?

Si leemos la definición de hereje en un diccionario y la descripción bíblica, usted encontraría algunas similitudes muy fuertes.

Por ejemplo, el diccionario dice que un hereje es un creyente profesado pero que mantiene opiniones religiosas contrarias a las aceptadas por su iglesia o que rechaza doctrinas prescritas por esa iglesia. Podría ser cualquiera que no se conforma a una actitud, doctrina o principio establecido.

La palabra hereje viene de la palabra griega «hairetikós», que significa «poder elegir», o «lo que se puede escoger», por lo que me hace pensar en un enfoque heterogéneo de la doctrina. Escogen un poco de esto y otro poco de aquello, pero dejan mucho fuera del plato.

Jesús dijo que es importante adorar a Dios en espíritu y en verdad (Juan 4:24), y una verdad a medias es igual a dos mentiras.

En términos bíblicos, un hereje es alguien que cree y puede está enseñando doctrina contraria a lo que la Biblia enseña (ej. Ef 2:8-9).

Un hereje usualmente es alguien que se ha apartado de lo que solía creer y ahora enseña lo contrario a lo que solía creer. Los herejes pueden estar en lugares que no son iglesias, pero para nuestras pregunta, queremos saber quien es un hereje para que podamos identificarlo, y así podemos evitarlo, ¡como también queremos asegurarnos de que no somos uno!

Sinónimos de Herejía

Hay muchos sinónimos para la palabra hereje, y parecen perfectamente apropiados.

Otros nombres para herejes son apóstatas, reincidentes, disidentes, escépticos, o pensadores libres. Si están basando sus creencias en el «pensamiento libre», entonces puedes estar casi seguro de que no está basado en la verdad… y si no es verdad, entonces es herejía.

Satanás tiene sus propios ministros, y en apariencia, se ven tan santos como pueden ser.

Obviamente, no se parecerán a los ministros de Satanás, sino que aparecerán como ángeles de luz (2 Cor 11:4).

No creo que nadie caiga en estas falsas enseñanzas, pensando: «Bien, ahora voy a ser engañado». Ocurre gradualmente, casi sin previo aviso. Con el tiempo, ciertos principios y doctrinas bíblicas se ven comprometidos.

Un hombre dijo un hereje no necesitamos mencionar el infierno o el arrepentimiento, sino simplemente decir: «Dios te ama», pero el problema con eso es que es sólo la mitad de la verdad.

Jesús dijo que el evangelio del reino de Dios consiste en arrepentimiento y fe (Marcos 1:14-15), y aunque Dios concede arrepentimiento (2 Tim 2:25), Dios manda a todos los hombres en todas partes a arrepentirse (Hechos 17:30), así que no es suficiente decir «Dios te ama,» sino que Dios requiere que hagamos discípulos de todas las naciones, bautizándolos, y enseñándoles las mismas cosas que Jesús enseñó a Sus discípulos (Mateo 28:18-20).

Los pecadores deben saber que la ira de Dios está sobre sus cabezas (Rom 2:5), así que deben correr a la cruz por misericordia.

Si nunca saben acerca del pecado y la ira de Dios, nunca verán la relevancia de la misericordia de Dios. La ira de Dios hace que la misericordia de Dios sea relevante.

El «Dios te ama» no parece hacer que la gente busque el perdón, sino que sólo crea una «película cálida» sin valor. Eso, sin embargo, no es conversión. El evangelio sin arrepentimiento y fe es herejía, y eso es hablado por herejes, y tristemente, a veces los herejes se encuentran en las iglesias.

Las Diferencias No Son Herejías

Me rompe el corazón tener que decir que he visto a cristianos llamarse unos a otros herejes sobre cosas que no secundarias.

Un hombre llamó hereje a su hermano porque no creía en hablar en lenguas. El otro dijo que era un hereje porque creía en el rapto en la Mitad de la Tribulación y no en un punto de vista Post-Tribulación, pero estas diferencias en la creencia no son bases para llamar a alguien un hereje.

Está mal usar la palabra hereje en contra de alguien que cree diferente de lo que creo.

Ciertas cosas no son esenciales para la salvación y si secundarias, así que tener diferencias de opiniones o mantener diferentes puntos de vista no significa que todos los demás que no estén de acuerdo con nosotros sean herejes.

Si esa persona dice que Jesús no era Dios, entonces eso es herejía, y los herejes hablan herejías, y deben ser silenciados, por lo menos en la iglesia, así que a menos que alguien cuestione la divinidad de Cristo, la santidad de Jesús, o el ser nuestro Señor y Salvador, no podemos llamar a alguien hereje por cosas que no son críticas para nuestra salvación.

Un hombre dijo que si no hablas en lenguas, no eres salvo, pero para mí eso se acerca peligrosamente a la herejía. Es una teología basada en el esfuerzo, y eso no sincroniza con el evangelio de Jesucristo (Ef 2:8-9), pero tu amigo no es un hereje sólo porque cree que las mascotas no van al cielo. La herejía es lo que socava las bases del evangelio, no las áreas donde la Biblia está en silencio.

Los Falsos Profetas y Su Herejía

No creo que necesite convencerte de que hay muchos falsos profetas hoy en día, y eso no debería sorprendernos porque Jesús dijo que una de las señales que llevarían a Su segunda venida sería que «muchos falsos profetas se levantarán y desviarán a muchos» (Mateo 24:11).

Note que Jesús dijo «muchos» y no pocos. Y aun vendrán en Su nombre pero «engañarán a muchos» (Mt 24:5), otra vez, «muchos» serán engañados y no sólo unos pocos, así que Jesús nos advierte de nuevo:

«Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestiduras de ovejas, pero que por dentro son lobos voraces» (Mt 7:13), así que habrá muchos, no pocos.

Debemos luchar por la fe que una vez fue dada (Judas 1:3) porque muchos pretenden ofrecerte un «gran mensaje evangélico»; un mensaje de verdadero bien, de sentirse bien, pero «hay otro, pero hay algunos que te molestan y quieren distorsionar el Evangelio de Cristo» (Gal 1:7).

Pablo dijo a la iglesia de Corinto que «si alguien viene y proclama a otro Jesús que el que nosotros proclamamos, o si recibes un espíritu diferente del que recibiste, o si aceptas un evangelio diferente del que tú aceptaste, bien lo tolerais» (2 Co 11:4), así que «aunque nosotros o un ángel del cielo te predicamos un evangelio contrario al que predicamos, sea anatema» (Gál 1:8).

Para ponerle un signo de exclamación, Pablo dice, «otra vez: Si alguno os está predicando un evangelio contrario al que habéis recibido, sea anatema» (Gal 1:9). Cualquier otro evangelio es herejía y cualquiera que lo enseña es un hereje, simple así.

Hay herejes en las iglesias hoy en día, pero quizás muchas de estas iglesias no son iglesias de Jesús, sino quizás iglesias de Satanás y con ministros de Satanás. Y en la televisión, ciertamente parecen ángeles de luz, pero en sus enseñanzas yacen tinieblas y mentiras, del padre de la mentira (Juan 8:44).

Es herejía enseñar que Jesús no era 100% hombre y 100% Dios; que Jesús no es Dios y no siempre ha sido Dios y plenamente divino; que Jesús no vivió una vida perfecta y sin pecado, ofreciendo un sacrificio satisfactorio para satisfacer la ira de Dios; y que Jesús no resucitó al tercer día y ahora se sienta a la diestra del Padre, dirigiendo Su iglesia.

Cualquier otra doctrina contraria a estas enseñanzas es «tergiversar el evangelio de Cristo» (Gal 1:7), y enseñar otro evangelio, «no que haya otro» (Gal 1:7).