«Esfuércense por mantener la unidad del Espíritu mediante el vínculo de la paz. Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así como también fueron llamados a una sola esperanza, un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos y en medio de todos y en todos» Efesios 4:3-6
¡Esforcémonos por mantener la unidad de la Iglesia! Como pastores, líderes y creyentes en general, tenemos la tremenda responsabilidad de evitar que esta unidad espiritual se rompa, no se trata de uniformizar los pensamientos de todos los que conformamos las diferentes denominaciones y grupos sino la disposición común a trabajar juntos y a servir unos a otros que es la verdadera actitud de Cristo.
«Les suplico hermanos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que todos vivan en armonía y que no haya divisiones entre ustedes, sino que se mantengan unidos en un mismo pensar y en un mismo propósito» I Corintios 1:10
El amado Apóstol Pablo intentó tantas veces predicar esta unidad, su voz sigue resonando en el tiempo y la exhortación se hace más urgente ahora que la Iglesia ha crecido en número pero también en diversidad. «Llénenme de alegría teniendo un mismo parecer, un mismo amor, unidos en alma y pensamiento» Filipenses 2:2.
La descripción de la Iglesia como el cuerpo de Cristo es una de la enseñanzas más significativas de Pablo, el mismo apóstol nos dice que Dios le dio una revelación especial acerca de este misterio, a saber que en virtud de la exaltación de Cristo, el Espíritu Santo ha constituido a todo el pueblo de Dios, tanto judíos como gentiles, como en un solo cuerpo, por eso el crecimiento y aún la existencia misma de la Iglesia depende de esta unidad.
«Que el Dios que infunde aliento y perseverancia les conceda vivir juntos en armonía conforme al ejemplo de Cristo Jesús, para que con un solo corazón y a una sola voz glorifiquen al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo. Por tanto, acéptense mutuamente así como Cristo los aceptó a ustedes para gloria de Dios»
Romanos 15:5-6
Querido Pablo, tuvo que enfrentar tantas voces diferentes que le decían ser los únicos y especiales, tuvo que sufrir menosprecios por no ser reconocido ni siquiera como apóstol, sin embargo en medio tantas voces discordantes, él siguió predicando la belleza de la unidad. ¿Está dividido Cristo? Dividir la Iglesia es tan absurdo como tratar de dividir el cuerpo humano, y el cuerpo de Cristo lo conformamos todos aquellos que hemos sido lavados por su sangre, los que le servimos por amor y gratitud, los que guardamos la esperanza de su venida, los que tenemos a Jesús como nuestra única cabeza y fundamento de la Iglesia.
La Iglesia en nuestro país ha crecido, las denominaciones se han multiplicado, ahora los líderes que conforman los servidores de ella hablan y tienen diferentes énfasis y visiones, pero si les preguntas sobre su fundamento, todos tenemos el mismo verso, las mismas frases de Pablo como dogma de fe: «un solo cuerpo y un solo Espíritu, una sola esperanza, un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo un solo Dios y Padre de todos».
Gracias a Dios que hay muchas razones para estar unidos, necesitamos seguir esforzándonos para guardar esta preciosa unión, si como Iglesia en el Perú buscamos continuar con este propósito divino, él y sólo él será glorificado.
«Permanezcan unidos por amor, y tengan toda la riqueza que proviene de la convicción y del entendimiento, así conocerán el misterio de Dios, es decir, a Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento»
Colosenses 2:2-3
Finalmente, Pablo predicó tanto sobre la unidad y sin embargo sus detractores no se cansaron en buscarle tres pies al gato con tal de seguir desunidos, por eso los animo a meditar en los verbos que él enfatizó para alcanzar la unión de la Iglesia:
- Esfuércense por mantener la unidad. Efesios 4:3
- Vivan en armonía. I Corintios 1:10
- Manténganse unidos. I Corintios 1:10
- Acéptense mutuamente. Romanos 15:5
- Permanezcan unidos. Colosenses 2:2
- Tengan un mismo parecer. Filipenses 2:2
- Manténganse alerta, permanezcan firmes en la fe, sean valientes y fuertes. Hagan todo con amor. I Corintios 16:13
Dios bendecirá a nuestra nación si no sólo predicamos de la unidad sino la hacemos realidad en la práctica.
Felices Fiestas Patrias
Martha Vílchez de Bardales
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