El Amor Divino

Nos hizo aceptos en el Amado,en quien tenemos redención por su sangre,el perdón de pecados.Efesios 1:6-7.

 

El Amor Divino

 

Resulta maravilloso descubrir que nuestras faltas y fracasos no alteran el amor de Dios. Él nos acepta y nos ama porque estamos unidos a su Hijo amado.

Leamos las siguientes palabras del apóstol Pablo: «Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotrosí… ¿Quién acusará a los escogidos de Diosí… ¿Quién es el que condenará?… ¿Quién nos separará del amor de Cristo?» Y concluye: «Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo porvenir… ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro» (Romanos 8:31-39).

El hecho de asirnos de ese amor personal e incondicional de Dios no debe llevarnos a una vida despreocupada. Todo lo contrario, ser conscientes de su amor nos alienta a tener una mayor abnegación por él, y esa abnegación es activa. Saber que Dios nos ama nos hace humildes y obedientes, pero también dinámicos y valientes.

En la cruz contemplamos la inmensidad del amor de Dios por nosotros. Allá Jesús exclamó: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?» (Mateo 27:46). Con respeto y emoción contestamos: «Por nosotros, por mí». Dios me amó a tal punto que no «escatimó ni a su propio Hijo», quien cargó con todos mis pecados: Jesús fue mi sustituto bajo la ira de Dios. Tomó mi lugar y ahora, cuando Dios me ve, ve a su propio Hijo. Estoy en Cristo y por eso soy amado con el insondable amor de Dios.

1 COMENTARIO

  1. hola, me siento mal, en mi juventud fui muy cristiano, pero luego me aparté, recientemente decidí volver mi corazón otra ves a Dios.
    El me ha ayudado a dejar algunas cosas que me perjudicaban y estoy tratado de levantarme a orar y buscarlo. Sin embargo ayer el pecado me golpeó y me senti que traicioné a Dios. No se si podré lograrlo, si podré levantarme; no sé si Dios me dará esa oportunidad. No sé que piensa de mi, ahora que le fallé otra ves.
    Quiero lograrlo, por mi, por mi esposa, por mis hijos, pero me siento muy confundido.
    Cómo puedo vencer este pecado?
    Que alguién ore por mi!

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí