El pastor Claudionor de Andrade dice que en la Iglesia no hay lugar para sexistas ni feministas

Pastor Claudionor de Andrade Aborda la Relación de Género en la Iglesia de Cristo

En un reciente sermón, el pastor y teólogo Claudionor de Andrade abordó la cuestión de la relación entre marido y mujer en el contexto de un matrimonio cristiano. Este sermón surgió en respuesta a un discurso pronunciado por el pastor Aldery Nelson Rocha, también de la Iglesia Asamblea de Dios, ministerio de Belém, en el que se sugirió que las mujeres deberían someterse incluso al punto de gatear como señal de obediencia a sus esposos, si así se les pidiera.

El pastor Claudionor de Andrade enfatizó que en la Iglesia de Cristo no hay lugar para el sexismo ni el feminismo extremo. Su discurso se centró en la idea de que Dios creó papeles diferentes para hombres y mujeres, pero esto no significa que uno sea más valioso o importante que el otro. Según el teólogo, Dios condena tanto el machismo como la influencia de la ideología feminista, que él considera antibíblica y una amenaza para las Asambleas de Dios.

El Valor de la Mujer en las Asambleas de Dios: El Ejemplo de Frida Maria Strandberg Vingren

Para ilustrar la importancia y el valor del papel de la mujer en las Asambleas de Dios, el pastor Claudionor de Andrade recordó la historia de la misionera sueca Frida Maria Strandberg Vingren. Esta valiente mujer estaba casada con el cofundador de las Asambleas de Dios en Brasil.

Frida Vingren se destacó por sus contribuciones a la iglesia como escritora, compositora y traductora, incluso en una época en la que las mujeres en la sociedad en general aún luchaban por sus derechos básicos, especialmente en la primera mitad del siglo XX. Su ejemplo es una prueba de que las Asambleas de Dios valoran y reconocen el papel crucial de las mujeres en la obra de Dios.

Refutando Malentendidos: La Sumisión de la Mujer en la Biblia

Claudionor de Andrade también abordó las acusaciones feministas de que el apóstol Pablo, autor de muchas epístolas del Nuevo Testamento, era «sexista». Para refutar este malentendido, el teólogo recurrió al pasaje de Efesios 5. En este pasaje, Pablo habla de la sumisión de la mujer a su marido, pero Andrade destacó que esta sumisión está condicionada por el amor sacrificial y ejemplar de Jesucristo hacia la Iglesia.

En otras palabras, el liderazgo del hombre en el matrimonio, como se menciona en el pasaje, se trata más de ser un modelo de abnegación, servicio y sacrificio que de ser servido. Esto resalta la idea de que, en el contexto bíblico, la autoridad conlleva una gran responsabilidad y no debe usarse para dominar o explotar a la esposa.

Esta enseñanza nos recuerda la importancia de comprender los principios bíblicos relacionados con las relaciones de género y el papel de la mujer en la Iglesia y la sociedad. A través de ejemplos como el de Frida Vingren y una interpretación adecuada de las Escrituras, podemos apreciar la riqueza y la diversidad de los dones y roles que Dios ha asignado a las mujeres en su obra.

Como creyentes, se nos desafía a rechazar tanto el sexismo como el extremismo feminista y a buscar un equilibrio que refleje el amor, el servicio y el respeto mutuo en nuestras relaciones y ministerios. Que esta enseñanza nos inspire a vivir de acuerdo con los valores del Evangelio y a reconocer el valor intrínseco de cada individuo, independientemente de su género. Como dice Gálatas 3:28: «Ya no hay judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús».